Si estás conviviendo desde hace ya un tiempo con tu pareja y no dejas de pensar en la pregunta del millón: ¿cómo saber si me quiero casar?, este artículo es para ti. No es una situación para tomarse a la ligera, lo más probable es que casarte sea una de las decisiones más importantes que vas a enfrentar en tu vida. Por eso, es común buscar señales que nos muestren si estamos listas para dar ese paso.
Hoy dedicamos este post a quien sienta que llegó el momento de unir su vida para siempre con su pareja, pero que necesita una señal extra para decidirse. Lee con atención estos cinco consejos sobre cómo saber si estoy lista para casarme.
1. Has superado el enamoramiento
Todas sabemos que la fase del romance solo dura los primeros años, una afirmación confirmada por los psicólogos. En ese tiempo todo parece color de rosa y, evidentemente, crees que tu relación y tu pareja son perfectas.
Cuando pasa esta etapa, en gran medida la profundidad de la relación crece, como también lo hace el conocimiento de la personalidad de tu compañero. Es frecuente que algunas parejas tiendan a desilusionarse durante esta transición, pero si estás completamente segura de querer estar con esa persona, es una señal importante.
Por otra parte, si piensas que el matrimonio está hecho para que una de las partes sea feliz, estás equivocada. No necesitas de otra persona para reconocer el valor que tienes como mujer; lo importante es que te quieras y la felicidad que tú sola te provees.
Cuando logras la armonía con quien eres, es más probable que puedas multiplicar esa felicidad con tu esposo. Pero ello no es suficiente para decir un rotundo sí a la pregunta: ¿cómo saber si me quiero casar?
2. Seguir haciendo realidad tus sueños
Si te preguntas, ¿cómo saber si estoy lista para casarme? Debes entender que una de las concepciones erróneas del matrimonio, es la idea de que tienes que abandonar todos tus sueños para dedicarte a tu esposo. ¡No! Si algo ayuda al éxito de un matrimonio es que ambos sigan persiguiendo sus aspiraciones, siempre contando con el apoyo del otro.
Y es que casarte, no implica que se vaya a perder el espacio personal. Por el contrario, se entiende que esa decisión da lugar a que disfruten de gustos y hobbies individuales, sin que esto represente estar juntos todo el tiempo. El amor no debe ser posesivo u obsesivo, sino permitir a los dos tener cierta independencia.
Otro detalle es que antes de entrar a una vida juntos donde compartirán gastos, tienen que estar seguros de tener una base financiera más o menos estable. De modo que estén con la tranquilidad de que el dinero no será un gran problema en sus primeros meses de casados.
3. Amas sus modos y defectos
Creer que tu novio no tiene defectos, es una mentira que te cuentas a ti misma. Así como tú tienes defectos y virtudes, él también. Y es importante que los conozcas, al mismo tiempo que entiendas su naturaleza y el amor que le tienes.
Si ya has visto su verdadera personalidad y has aprendido a valorar su compromiso, entonces estás un paso de cómo saber si te quieres casar. Pero atención, lo mismo va para él; tiene que amarte a pesar de tus defectos. ¡El amor es una decisión!
Hay parejas que contraen matrimonio sin estar seguros y conscientes de lo que representa; la emoción y los sentimientos de entusiasmo muchas veces influyen. ¿Cómo saber que estás lista para casarte? Pues porque estás clara que junto a él te espera un futuro prometedor; o sea, que su hogar esté fundado por un verdadero amor y las ganas de crecer juntos.
Dentro de este mismo punto podemos asegurar que debes admirar a tu prometido y le ves las cualidades para ser un gran padre. Crucial es que estés segura de que puede ser el ejemplo perfecto para tus hijos.
4. Su familia te quiere
Aunque el matrimonio es un asunto de dos, lo cierto es que al dar el paso también te unes con su familia. Por eso es muy importante que exista una relación cordial entre sus padres y tú, y de él con los tuyos.
Una mala relación con tus suegros o cuñados va a afectar de una manera u otra la estabilidad de tu matrimonio. También asegúrate de que tus padres sean capaces de mostrar estima y aprecio por el hombre que has escogido para toda la vida.
Es frecuente escuchar la frase de que cuando nos casamos con una persona también lo hacemos con su familia. Es una realidad que luego de la boda, debes prepararte para formar parte de una nueva familia y darle la bienvenida a un miembro más a la tuya.
Luego de pasar por el altar, ya no irán cada uno por su lado, sino que serán uno solo y este aspecto si no se lleva bien puede afectar la relación con tu familia.
5. Estás dispuesta a luchar a pesar de las dificultades
La vida de una mujer no tiene que cambiar completamente por el matrimonio, pero en el trayecto del camino habrá algunos sacrificios que tendrán que hacer ambos. No es algo malo, pues debes considerar que ahora compartes tu tiempo y espacio con otra persona.
De igual manera, habrá días de enfermedad, de compromisos y de tareas que no podrás evitar, pero estas son cosas normales de la vida en pareja. Si estás dispuesta a sobreponerte a estas dificultades, entonces te será muy fácil responder la pregunta de ¿cómo saber si estoy lista para casarme?
En resumidas cuentas, el matrimonio es una condición bien compleja y a la vez bonita. Hay épocas en las que todo marcha perfecto, pero no estarán exentos de pruebas y obstáculos. Deberán sobreponerse a ellos y luchar por su matrimonio y esa felicidad que buscan a largo plazo.
Cómo saber si estás lista para casarte es muy fácil, con que estés segura y comprometida a luchar por tu amor basta. No te confundas, esta lucha no es en solitario, si tu pareja no está dispuesta a poner de su parte no vale la pena tanto esfuerzo.
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